¿Qué es Basura Cero?
GAIA reconoce la definición de Basura Cero adoptada por la Alianza Internacional Basura Cero: “Basura Cero es la conservación de todos los recursos a través de la producción y el consumo responsables, la reutilización y recuperación de todos los productos, envases y materiales sin incinerarlos y sin generar emisiones al suelo, agua o aire que supongan una amenaza para el ambiente o la salud humana.” (ZWIA, 2018)
Más allá de la definición, Basura Cero es un objetivo que apunta tanto a conservar recursos como a la justicia ambiental y social, la regeneración, la equidad y el respeto por la naturaleza.
Al diseñar e implementar planes de Basura Cero a nivel local, los municipios deben respetar e involucrar a todos los sectores que componen el ecosistema de los residuos, incluyendo comunidades y trabajadores formales y de la economía popular.
En términos prácticos, Basura Cero se rige por cinco líneas estratégicas:
- El objetivo de llevar a cero la disposición de residuos en basurales, rellenos e incineradores
- La responsabilidad industrial y el rediseño de productos
- Encauzar los patrones de consumo dentro de los límites ecológicos
- Desarrollar circuitos e infraestructura para recuperar recursos en la mejor calidad y uso posible
- Garantizar la justicia social y ambiental, respetando e involucrando a todos los sectores que componen el ecosistema de los residuos
¿Que no es Basura Cero?
Debido a su atractivo, el término “Basura Cero” ha sido utilizado en forma distorsionada por quienes promueven estrategias convencionales de manejo de residuos, a modo de maquillaje verde. Por ejemplo, algunas empresas de incineración alegan que venden tecnología “basura cero”, a pesar de que la incineración de residuos genera una gran cantidad de residuos sólidos peligrosos (cenizas de fondo y volantes) y emisiones tóxicas al aire. Esta premisa se usa sobre todo para las variantes más exóticas de la incineración, como la pirólisis, la gasificación, el arco de plasma o la transformación de plásticos en combustibles. Algunas empresas y ciudades adoptan objetivos de “basura cero a los vertederos” mientras dependen fuertemente de la incineración. Otros municipios han adoptado programas de “basura cero” que se enfocan meramente en mantener limpias las calles, parques o costas. Algunas multinacionales de bienes de consumo han lanzado programas de “basura cero” pero continúan inundando el ambiente con plásticos de un solo uso.